En el marco de las tradiciones espirituales y religiosas, los espíritus obsesores son entidades o seres desencarnados que influyen de manera negativa en las personas vivas, perturbando su equilibrio mental, emocional y espiritual. Este concepto es especialmente común en el Espiritismo, una doctrina desarrollada en el siglo XIX por Allan Kardec, pero también tiene presencia en otras creencias espirituales como el Umbanda y el Candomblé.
¿Qué son los Espíritus Obsesores?
En la doctrina espírita, los espíritus obsesores son almas que no han alcanzado un estado de evolución espiritual adecuado. Tras la muerte física, algunos de estos espíritus, debido a su bajo nivel de conciencia, permanecen apegados a sensaciones materiales, emociones negativas o personas con quienes compartieron experiencias en vida. Este apego genera la obsesión, una forma de influencia persistente y dañina sobre el espíritu encarnado.
Los espíritus obsesores suelen actuar por razones como:
Venganza o rencor: En muchos casos, estos espíritus se sienten agraviados por acciones que percibieron en su vida terrenal y buscan castigar o perjudicar a aquellos a quienes culpan.
Deseo de poder: Algunos espíritus buscan controlar o dominar a una persona debido a su propia necesidad de reafirmarse.
Apegos materiales o emocionales: Otros permanecen apegados a los placeres de la vida física, como el alcohol, el sexo o las drogas, y buscan experimentar estas sensaciones a través de los vivos.
Tipos de Obsesión
El espiritismo clasifica la obsesión en diferentes niveles, dependiendo de la intensidad de la influencia del espíritu perturbador:
1. Obsesión simple: En este nivel, el espíritu obsesor interfiere en la mente de la persona, induciendo pensamientos repetitivos o negativos, pero la víctima aún conserva cierto grado de control sobre su conciencia.
2. Fascinación: Aquí, el espíritu obsesor logra confundir a la persona, haciéndola creer en ideas falsas o ilusorias. La persona puede comenzar a tomar decisiones perjudiciales sin darse cuenta de que está bajo una influencia externa.
3. Subyugación: Este es el nivel más grave, en el cual el espíritu obsesor domina completamente a la persona, afectando su voluntad y comportamiento. En algunos casos, la subyugación puede manifestarse de manera física, como en movimientos corporales involuntarios, o mental, con el control completo de la mente.
El Proceso de Desobsesión
El espiritismo y otras tradiciones espirituales proponen prácticas para liberar a una persona de la influencia de los espíritus obsesores. Este proceso es conocido como desobsesión. En el Espiritismo, los centros espíritas ofrecen reuniones mediúmnicas donde los médiums, bajo un estado de concentración y protección, buscan contactar con los espíritus obsesores para persuadirlos de abandonar su camino de obsesión. A menudo, se les ayuda a comprender su situación, promoviendo su evolución espiritual.
En el Umbanda, la desobsesión puede involucrar la intervención de entidades espirituales benéficas, como los Pretos Velhos, Caboclos o los Exus, que interceden para expulsar a los espíritus perturbadores y restaurar el equilibrio de la persona afectada.
Prevención de la Obsesión
Uno de los principios fundamentales del espiritismo es la evolución moral y espiritual. Para evitar caer bajo la influencia de un espíritu obsesor, se promueve la práctica de la caridad, la auto-reflexión y el mejoramiento personal. Una mente fuerte, equilibrada y enfocada en el bien, es menos susceptible a ser influenciada por espíritus de baja vibración.
Además, mantener un ambiente armonioso, libre de emociones negativas como el odio, el miedo y el rencor, también contribuye a prevenir la obsesión. La oración y la meditación también son herramientas poderosas para mantener una conexión con energías positivas y alejar influencias perturbadoras.
Conclusión
Los espíritus obsesores representan una realidad espiritual que muchas tradiciones consideran como un obstáculo en el camino hacia la evolución y el bienestar. Comprender su origen y naturaleza, así como las formas de protegerse y liberarse de su influencia, es crucial para mantener el equilibrio espiritual y alcanzar un estado de paz interior.
